Tú, mi vanidad.

Vanidad, vanidad, vanidad. ¡Oh! Mi querida Vanidad,cuanto extrañaba sentir tus brazos frígidos sobre mi y acurrucarme una vez más en ellos. Me siento como si fuesen TUS brazos, pero no lo son. Siento una vez más esa calidez que finjo en mi corazón que ya no existe. Te extraño, te anhelo, te necesito, te deseo, te huelo, te siento, te amo. Pero sobre todas las cosas te amo. Como decírtelo a la cara, como hacer que lo comprendas, si más bien son mis pensamientos y mis sentimientos guardados en una gran caja de cristal que cada día explota en llantos y en lamentos cuando te necesito, me refugio en otros solo porque te necesito. En otro inexistente que destruye mi vida, que hace que mis deseos superficialmente se hagan realidad. Mis pensamientos, mis sentimientos, eres todo TÚ.